Una de las claves para transplantar tus plantas con éxito, es elegir momento adecuado para hacerlo. Generalmente, lo ideal es hacerlo antes de que la planta empiece su floración o su época de crecimiento, es decir a finales del invierno o principios de la primera
Además, es importante tomar en cuenta cada cuando se debe hacer este proceso. Según el tipo de plantas, estás se deben trasplantar cada año, aunque algunas especies que tardan más en crecer, por lo que se transplantan cada dios o tres años.
En caso de realizar el transplante en el jardín o exteriores, es importante proteger la planta del frío durante y después del procedimiento, para evitar que está se debe por el cambio de temperaturas.Con respeto a la hora del día, es mejor realizar el transplante muy temprano, antes de la puesta del sol o al anochecer para proteger a la planta del sol mientras se adapta a su nueva ubicación.
Los materias necesarios son:
* Tijeras de poda
*Pala jardinera
*Guantes de jardinería o cuero
* Maceta nueva
*Sustrato adecuado para la planta
*Arcilla expandida u otro material de drenaje
*Agua para regar
¿Cómo se hace el trasplante?
Es un proceso que debe hacerse con los cuidados necesarios para evitar que las platas sufran una experiencia traumática.
Pasos:
1- Preparar la base de la nueva maceta o la zona del jardín en la que de desees plantar de nuevo la maceta, creando una capa de drenaje para el exceso de agua fluya.
2- Colocar un trozo de loza en el orificio de la maceta y vierte unos centímetros de arcilla expandida u otro material de drenaje.
Prepara el sustrato, mezclando con arena de río y fertilizante adecuado para la planta y coloca en la nueva maceta.
3- Retira la planta del contenedor anterior, ya sea con ayuda de la pala o tumbando la maceta y haciendo un poco de presión para extraerla poco a poco. En caso de que la planta se encuentre en el jardín, hay que cavar un poco alrededor y extraer la planta con cuidado.
4- Revisa las raíces de tu planta y, en caso de que tengan forma de espiral o estén demasiado apretadas, hace pequeños cortes verticales con ayuda de las tijeras.
5- Coloca la planta en la nueva maceta, de modo que la raíz este al nivel del suelo y rellena los espacios vacíos con la tierra cuidando de dejar centímetros libres entre la tierra y el borde de la maceta para que la tierra no salga cuando riegues.
6- Preciosa el sustrato con ayuda de las manos o herramientas para evitar que queden bolsas de aire dentro de la maceta y riega la plata.
7- Por último deja dos o tres días tu plana en una zona luminosa evitando que reciba directamente la luz solar. Después de este periodo tu planta se habrá adaptado para ponerla en una nueva ubicación definitiva.
